21 septiembre 2007

Fernando Carrera


















mencionado por
Hugo Plascencia

menciona a
Gerardo Deniz
Eduardo Lizalde
Jorge Esquinca
Luis Armenta
Xitlálitl Rodríguez
Luis Vicente de Aguinaga
Francisco Hernández
Coral Bracho
Juan Castañeda
Francisco Magaña


bio-bibliografía

Guadalajara, Jalisco, 1983. Mención honorífica en el Premio Nacional de Poesía Efraín Huerta 2006. Ganador del certamen de poesía “Letrario” 2006 organizado por la Universidad de Guadalajara, México. Mención honorífica en el tercer Certamen Internacional de poesía y narrativa breve, Buenos Aires, 2003. Autor de “Expresión de fuego”, Mantis Editores 2007. Fundador del suplemento literario “Palabral” de la Universidad del Valle de Atemajac (Univa). Se encuentra antologado en “Poesía viva de Jalisco”, CONACULTA-Secretaría de Cultura del Estado de Jalisco. Publica en diversos medios impresos y electrónicos a nivel nacional e internacional.


poética

En el centro de la flama
palabra y caricia
forman un silencio

En el centro del silencio
la palabra
es caricia que arde


poemas


Niebla.
:::::::Niebla.
::::::::::::::Blanco. En el azul del tiempo una mancha blanca. No nieva, niebla en la montaña sorprendida, en tu cuerpo blanco el azul se estira, se mueve, en el rojo nieve. Niebla. Sopla la carne encendida, un mundo por tus poros sopla. Aire, quema la memoria, bajo el paso de las manos un recuerdo se incendia. El instante es aire, se desviste el tiempo entre las manos. Nieva, fuego blanco
::::::::::::::Plenitud de la carne en la visión quieta, detenida en el ojo ávido. No existes, eres más allá de lo existente, quemas, qué más: fuego, llama el espíritu, llama la cabellera, tu voz. Sin decir nada eres astro. Se consume la estrella en su propio deseo, nieve blanca o explosión Niebla Densa entre mis manos que te piensan. Pensamiento de lo que no piensa. Deseo, blanco pensar del rojo. Llama de voces milenarias, hoguera del espacio transparente.



MUTACIÓN

Diariamente me fugo
:::::::::::::::::::::hacia la nada

un grito de luz
origen de herrumbre
el aire es un cristal rojo
difuminado entre dos lunas
(dos manos que se estiran)

ante el nuevo enigma
soy el pájaro anidado
en la curvatura del silencio


*

Escribo tu nombre como quien traza coordenadas de un lugar inexistente: cuelgan los fonemas de una imagen y la imagen del tacto: memoria de las manos, aprendizaje de peces en el tiempo de la carne: universo destinado a consumirse

: contracción de la memoria al paso del río transparente: se abre la caja china hasta alcanzar la infinita, la imposible: se funde la distancia entre las células del pensamiento, sus moléculas se mueven lentas, se aletargan: la memoria es un caldo espeso, cada vez más homogéneo e indiferente

—todas las piedras ya reposan en el fondo—

: todo lo que es baila en el mismo (víbora víbora de la) mar: escribo tu nombre que cada vez es más letras / polvo que presume ser palabra en la punta de la lengua, luz que salta y se despeña
Un niño asoma en la arboleda: llueve, el cielo cae del cielo: todo se rinde ante la grave idea del que piensa este paisaje, todo se sabe el efecto de una misma causa, las ideas se licúan en la idea, todo nada todo: el anciano asoma en la arboleda, sólo se distingue un cuerpo de mujer en el espejo.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Mas que felicitación gracias, por cantar imagen y palabra en el centro de nuestro caracol.

Anónimo dijo...

HERMANO, GRACIAS POR COMPARTIRNOS TUS POEMAS, SIN FALSO HALAGO, ME PARECE DE LO MEJOR QUE HE LEIDO EN ESTA ESPACIO DE LAS ELECCIONES AFECTIVAS

Anónimo dijo...

Muchas gracias por sus comentarios, y por darse un espacio en el tiempo (lleno de espacio al fin) para leer estos textos. Abrazos renovados.

FC

Anónimo dijo...

me gusto tanto mutación: muy chido poema. Y vos disculpad pero debo decirlo: estas muy guapo!! espero no tengais genes , acaso, muy homofóbicos. Saludos!!!

Anónimo dijo...

por qué tiene que ser el autor quien se alabe a sí mismo??

stradavarious dijo...

Cuando la rama es más pesada que el tronco, el árbol suelta, pues si no se quiebra. Que bueno que en esa libertad tus palabras tienen alas, y vuelan tan alto que se incendian en una inmenza luz, que incandece y arde a nuestros corazones con tu poesia. Que ufano, que honrado me siento de ser tu tronco hijo amado.
Tu papá.